Día 13
Hoy no me siento bien por la mañana, así que me tomo con calma el levantarme y desayuno algo ligero. A media mañana nos dirigimos a la casa de nuevo. Hoy mantengo una larga conversación con Raquel, una de las fundadoras de la asociación.
Me comenta que el aborto aquí es un tema tabú y que aunque teniendo presentes las leyes existe un artículo en el que está permitido si la salud de la madre corre peligro no sucede así. La violación en este país antes del 1999 no era un delito. Se solucionaba mediante una multa o en el caso que la víctima se casara con el agresor o uno de los agresores se saldaba la deuda. A partir del 2000 si la víctima tenía menos de 14 años el agresor generalmente iba a la cárcel, en cambio si la víctima superaba los 14 se la culpaba por seducción y el agresor quedaba impune. A partir del 2006 se considera la violación como un delito.
Las mamás que viven en la casa son visitadas por su familia una vez al mes, en el caso en que la familia no tenga nada que ver con la situación de la niña y en el caso que la mamá de ésta no la repudie por el hecho que el padre este en prisión. Además, como el penal queda al ladito de la casa, las familias pueden hacer ambas paradas en una tarde.
La mujer en el Perú está muy infravalorada y una mujer sin un varón a su lado no es nadie, por lo tanto aguantan lo que sea. Por este motivo las mamás de Mantay siempre desean que su hijo sea un varón porque de esa manera todo será más sencillo para él en todos los ámbitos y no pasarán lo que ellas pasaron. El machismo del país se refleja en cualquier lugar. Por ejemplo en los carteles de publicidad se observan mujeres medio desnudas promocionando cualquier cosa; ya sea un bote de pintura, una batería para un coche o un celular.
Mantay se creó en el 2000 en otro lugar y más tarde se mudaron a San Jerónimo para tener una mayor dimensión de terreno. De esa manera hoy pueden ampliar el lugar.
Por la tarde realizamos varias actividades con los bebes. Tomando varios rollos de papel higiénico. Cada uno de los niños debe pintarlos escogiendo los colores que quiera usando sus manos. Al principio les cuesta tomar el control de la pintura y se derrama por sus dedos. Finalmente mezclan colores usando las dos manos. Las mamás colocan el papel celofán alrededor de los rollos y creamos unos prismáticos.
La última mamá que llegó la semana pasada resultó que no estaba embarazada y la regresaron a otro hogar. Dicha mamá había pasado las dos últimas noches en la cárcel debido a las redes de prostitución que hay en las minerías. Ellas viajan al lugar para emplearse en alguna cocina y allí son explotadas. Ahora el gobierno controla las zonas y a ella la tomaron por una mujer prostituida antes de llegar al lugar.